Nuestro buen Sergio apuntando hacia las ruinas del Castell de la VIlavella.
Segundo viernes por la tarde en el que salimos a darlo todo en un recorrido btt ideado para ser completado en 2-2,5 horas. En esta ocasión, el trazado elegido fue una combinación de ambientes marinos, rurales y algo de montaña. Desde la Playa de Nules hasta la cima de la Murta, entre la Vall y la Vilavella.
Salida desde el puerto de Burriana. Por el camí de la Serratella hasta la Playa de Nules, pasando por el Estany de patos. Siguiendo por la costa, llegamos al Grao de Moncofa. Por caminos rurales, nos alejamos de la costa hacia Xilxes. Tramo de carretera subiendo por el puertecito de Xilxes hasta la Vall d’Uixó. Tomamos un tramo de la carretera de Algar rodeando la Vall. Entramos a la Vall por el este ascendiendo por la carretera de Alfondeguilla. Antes de llegar al barranc Randero, torcimos a la derecha subiendo por el camino del Castillo y de la Murta. Tras alcanzar la cima de les Cases de la Murta, seguimos empalmando los caminos y pistas que cruzan los barrancos de la Roña y de la Murta para llegar a la Vilavella. Bordeamos el municipio por la urbanización Santa Bárbara dirección a las Eses y el Castillo. En el desvío de las Eses, nos dirigimos hacia el núcleo urbano de la Vilavella. Por el trazado del antiguo ferrocarril de las canteras, camí de la Vieta, nos dirigimos hacia Mascarell. Desde el pequeño municipio amurallado, carril bici hasta Burriana.
Mucho viento de cara por los caminos marítimos que conducen hacia el Grao de Moncofa. Además, el felón de Sergio llegó 15 minutos tarde y encima tecleando sin parar. Inadmisible. A las 16:05 nos poníamos en marcha desde el puerto de Burriana. Fugaz paso por la siempre fantasmal playa de Nules en los meses invernales. Calles vacías y propiedades abandonadas. Paisaje urbano desangelado.
Llevábamos la ruta cargada en el gps, previo diseño en casa con Mapsource. Investigué caminos rurales que conectaran el grao de Moncofa con Xilxes. El resultado de ello fue ciclar por lo que podríamos llamar la Desolación de Xilxes, bastos terrenos llanos limitados por el mar al este y la carretera general al oeste. La vista se pierde entre campos de naranjos abandonados en los que han crecido arbustos secos de aspecto lúgubre. Abunda el vertido furtivo de escombros y basura así como varias fogatas marginales.
Tras nuestro paso por el páramo de Xilxes, salimos a carretera y empezamos a ascender el puertecito que conduce a la Vall. Me puse en cabeza a marcar un ritmo constante que Casero siguió sin ninguna dificultad. Se le están poniendo las piernas a tono. Llegados a la Vall, hubo que meter el plato grande y acelerar por la carretera de Algar, pues tiene mucho tráfico y poco arcén.
Empezamos a ascender por la carretera que lleva a Alfondeguilla. Más o menos en la parte central de la Vall, tomamos el camino de la Murta. Antes de llegar a les cases de la Murta, hay unas buenas rampas por asfalto al 17%. Es la parte más bonita de la ruta, con buenas vistas al pic Font de cabres y al Castillo de la Vall, en un paisaje fusión de campos rurales y montaña.
Perfil del camino de la Murta. En nuestra ruta, el perfil se ajusta a la vertiente de la Vall.
Desde la cima de la Murta, disfrutamos de un vertiginoso descenso por hormigón dirección a la Vilavella, enlazando caminos rurales y pistas de tierra e la zona de los barrancos de la Roña y la Murta. Al poco tiempo llegamos a la Vilavella, pero la rodeamos por la urbanización Santa Bárbara camino de las Eses y el Castillo de la Vilavella. Descendimos a la Vilavella y dejamos atrás la parte montañosa de la ruta. El regreso fue bastante plácido por el habitual camí de la Vieta y el carril bici Nules.
No es una ruta btt específica, pues presenta un 89% de asfalto. Tiene interés paisajístico la zona de la Murta, que además es donde encontramos los pocos tramos de pista del recorrido. Es interesante por la combinación de los ambientes marino, rural y montaña en poco menos de 50 kms de recorrido. Se puede completar en unas 2,5 horas con una media de casi 20 km/h. Buena ruta para nuestras escapadas de viernes por la tarde, pero para hacerla en fin de semana…puede saber a poco.
Plano de firmes en la ruta. En gris se ve la parte asfáltica y en rojo oscuro las pocas zonas de pista.
Llevábamos la ruta cargada en el gps, previo diseño en casa con Mapsource. Investigué caminos rurales que conectaran el grao de Moncofa con Xilxes. El resultado de ello fue ciclar por lo que podríamos llamar la Desolación de Xilxes, bastos terrenos llanos limitados por el mar al este y la carretera general al oeste. La vista se pierde entre campos de naranjos abandonados en los que han crecido arbustos secos de aspecto lúgubre. Abunda el vertido furtivo de escombros y basura así como varias fogatas marginales.
Tras nuestro paso por el páramo de Xilxes, salimos a carretera y empezamos a ascender el puertecito que conduce a la Vall. Me puse en cabeza a marcar un ritmo constante que Casero siguió sin ninguna dificultad. Se le están poniendo las piernas a tono. Llegados a la Vall, hubo que meter el plato grande y acelerar por la carretera de Algar, pues tiene mucho tráfico y poco arcén.
Empezamos a ascender por la carretera que lleva a Alfondeguilla. Más o menos en la parte central de la Vall, tomamos el camino de la Murta. Antes de llegar a les cases de la Murta, hay unas buenas rampas por asfalto al 17%. Es la parte más bonita de la ruta, con buenas vistas al pic Font de cabres y al Castillo de la Vall, en un paisaje fusión de campos rurales y montaña.
Perfil del camino de la Murta. En nuestra ruta, el perfil se ajusta a la vertiente de la Vall.
Desde la cima de la Murta, disfrutamos de un vertiginoso descenso por hormigón dirección a la Vilavella, enlazando caminos rurales y pistas de tierra e la zona de los barrancos de la Roña y la Murta. Al poco tiempo llegamos a la Vilavella, pero la rodeamos por la urbanización Santa Bárbara camino de las Eses y el Castillo de la Vilavella. Descendimos a la Vilavella y dejamos atrás la parte montañosa de la ruta. El regreso fue bastante plácido por el habitual camí de la Vieta y el carril bici Nules.
No es una ruta btt específica, pues presenta un 89% de asfalto. Tiene interés paisajístico la zona de la Murta, que además es donde encontramos los pocos tramos de pista del recorrido. Es interesante por la combinación de los ambientes marino, rural y montaña en poco menos de 50 kms de recorrido. Se puede completar en unas 2,5 horas con una media de casi 20 km/h. Buena ruta para nuestras escapadas de viernes por la tarde, pero para hacerla en fin de semana…puede saber a poco.
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