BTT NOCTURNA 5 A AIGÜES VIVES I COLL DE BETXÍ (TOROS-GANADERÍA LA PALMERA) 26-07-2017

3 valientes bikers con la luna al fondo en el Coll de Betxí, disfrutando de un pequeño ágape nocturno.

Hola amig@s, hemos disfrutado de la quinta nocturna btt de la temporada, 3 valientes lanzados al monte con ganas de contemplar los paisajes nocturnos silenciosos de la zona este este de acceso a la Sierra de Espadán. Con CarlosB, AlbertoZ y servidor QuicoF, iniciamos trayecto por las ruralidades habituales de Nules-Vilavella. De ahí fuimos a buscar la zona  de Aigües Vives, la pista de Collao-Artana, el ascenso al Coll de Betxí, y la bajada por pista hasta Betxí por la ganadería de la Palmera, que ahora viene identificada en Google Maps como ganadería Pascual Alcalà, que por más que cambien el nombre, el lugar sigue siendo peculiar y muy agresivo a la vista, más aún a las fosas nasales. Vamos con más datos de la etapa, como el tema de sorprender a un individuo arrastrando un burro muerto atado a un utilitario con una cuerda, con nocturnidad y alevosía.

TRACK STRAVA

VÍDEO DE LA RUTA EN RELIVE

Etapa nocturna sencilla ascendiendo por la vertiente rural de Vilavella y Aigües Vives, y bajar por la pista del Coll de Betxí-Ganadería, ese era el plan trazado, sencillo y para todos los públicos.

Acercándonos al sendero Paioni, optamos por acometer un rodeo que te lleva hacia la zona d'Aigües Vives sin tener que ciclar el sendero al revés.

Para coronar Aigües Vives hay que dar pedales de lo lindo en el último tramo hormigonado.

Desde hacía ya varios kms, los neumáticos de AlbertoZ crepitaban al rodar, algo clavado había. Hasta 9 pinchos salieron de la cubierta, ese tipo de pincho que tiene forma de seta hacia el exterior, pero con un afilado aguijón hacia el interior de la rueda. El tubeless obró el milagro del taponar, pero algo de aire se perdió y tuvimos que parar a inflar, parece ser que el neumático tubelizado delantero no tenía suficiente líquido para taponar tantas perforaciones.

Tras solucionar parcialmente el percance, con una botella de CO2, nos dirigimos hacia Artana por la pista off road lateral, y casi llegando al cementerio, emprendimos el ascenso al coll de Betxí por su lado más corto, la vertiente de Artana, y ya la noche caía sobre nuestras cabezas.

Llegados a la cima del Coll, nos esperaba nuestra mesa de piedra para hacer el picnic nocturno, un cielo despejado, las montañas de Espadán al fondo, nuestro satélite nocturno en fase lúnula creciente, y algún que otro mosquito intentando hacer su agosto a finales de julio.

Tras una cena más bien escasa a base barra y plátano, y ya totalmente a oscuras, nos dejamos caer hacia Betxí por la pista de la ganadería

Y 1 km antes de llegar a la ganadería, nos sobrevino el hecho luctuoso de la jornada. A lo lejos contemplamos a un vehículo que ascendía a toda prisa y con las luces largas puestas. El vehículo hacía un ruído sospechoso, demasiado fuerte para tratarse de un utilitario, como que algo le rozaba contra el suelo. Al llegar a su altura nos tuvimos que hacer a un lado para que pasara, pues parecía que el utilitario no estaba en condiciones de maniobrar. Una intensa polvareda y en cuanto arranqué vi que arrastraba un cuerpo. El olor a muerte era indescriptible, y no de muerte reciente, era hedor a carne podrida y putrefacta. No pude enfocar el cuerpo pues mi foco está fijo en el manillar. Pero uno de los compañeros llevaba foco en el casco y pudo echarle un vistazo. Era un burro muerto y podrido, que el individuo había atado de malas maneras a la parte trasera de su vehículo, y que venía arrastrándolo dios sabe cuántos kilómetros. No pudimos ver la matrícula, ni la cara del individuo, ni si había uno o varios metidos en ese destartalado utilitario. Tras largarse él hacia arriba, y nosotros hacia abajo, el olor a muerte nos persiguió aún durante casi 1 kilómetro. Unos hechos muy sospechosos y sin duda delictivos se instalaron anoche en la pista del Coll de Betxí.

Bueno, y hasta aquí hemos llegado. Más nocturnas y más variadas en breve. Salud y buenas pedaladas compañer@s.