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La Font de Cova Avellanes, no quedaba en nuestros seres ni una sola
parte seca |
Sí amig@. El 12 del 11 fue la fecha elegida para acudir a la llamada de los amigos norteños, los bikers de Tortosa, Alcanar, Sant Carles y alrededores. Agasajados e invitados fuimos hacia Tarragona para disfrutar de una sencilla etapa btt de 24 kilómetros en lo que el bueno de Enric llamó "volta a la mola lo port". Gran jornada la que nos esperaba en la falda norte del imponente Mont Caro. Y allá que fuimos Doctor y Servidor. Y el clima no acompañó en absoluto pero a pesar de ello pudimos disfrutar de una larga jornada entre amigos, risas, comidas y...un poquito de btt. Comenzamos.
Pues bien, El Mont Caro está bien lejos y la etapa preparada por Enric, para unos 20 bikers en total, debía comenzar sobre las 10:00 desde el Restaurant del Port en la cara norte del citado monte, que es la elevación suprema de la provincia de Tarragona. A las 07:30 me recogió el Doctor y salimos por autopista a buscar la aventura norteña. La verdad que la climatología no acopañaba, el día anterior habían caído como 150 litros/m2 en nuestra zona, más granizo. Pero desde el norte las noticias no eran malas, a pesar de que la gota fría de noviembre se desplazaba inexorablemente hacia el norte.
A las 09:00 ya estábamos enfilando el puerto del Mont Caro en coche, uno de los más bellos y más duros de España, coloso que subí con el Capitán en octubre del año 2020, ved aquí el reportaje.
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La Altimetría del Mont Caro por ALTIMETRIAS.NET |
En esta ocasión, no tuvimos que subir hasta la cima, nos desviamos hacia la urbanización El Mascar como se puede ver en la altimetría anterior. Ya ascendiendo la niebla se hizo presa de todo nuestro alrededor desde el km 10-11 a contar desde Roquetas, y la temperatura bajó hasta los 11-12ºC. La cosa pintaba bastante mal. Pero llegamos al Restaurant del Port sobre las 09:40 y encotramos como a una veintena de risueños ciclistas bien dispuestos para la aventura. Algo de lluvia ya caía, así que la opción más sensata fue dejar de lado los preparativos y almorzarse copiosamente y sin ninguna prisa. Sabia decisión. Se me ofrecieron potes de porc y rabo de toro y otras delicatessen de las que son muy fans estos del Port. Potes me comí en 2020 en ese mismo lugar y no me las pude acabar. Me decante por la más conservadora opción del bocata de francesa con longaniza bien regado con vino de la casa y un carajillo al estilo norteño.
La etapa prevista por Enric era ésta:
A las 11:23 estuvimos todo listos para montar en bicicleta. No lo había comentado, pero la noche anterior a nuestra llegada cayeron como 150 L/m2 sobre el Parque Natural dels Ports de Tortosa y Beceite. Así estaban las pistas forestales. Fue arrancar y empezó a llover con insistencia. Además, lo que cayó la noche anterior no fue todo agua...Entrando en el primer bosque aparecieron acumulaciones de granizo. La cosa se ponía seria.
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| Restaurant del Port |
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| La Pivot |
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| Fue el último estertor de la maravillosa cámara de fotos Casio EX-ZR200, murió al regresar al bar |
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| Dicen que la noche anterior cayeron 150 litros. Y algunas toneladas de granizo |
Nada más dejar el primer asfalto, Enric nos dirigió a una pista-senda en bajada que acabó en un cruce por río...por río de hielo. Pues había como medio metro de granizo por el que tuvimos que cruzar a pie. El primer pie sobre esa cama de granizo se resolvió con un hundimiento y agua hasta las rodillos. Entre la lluvia y el río ya no quedaba parte seca alguna en el cuerpo humano, a pesar de chaquetas waterproof, chubasqueros y otras prendas para el agua. Y llovía con fuerza. El nutrido grupo de 20 bikers se desapareció. Lo menos 14-15 regresaron al bar en ese instante y el resto...pues seguimos adelante, pues más ya no nos podíamos mojar y había que disfrutar de los que se pudiera entre la fuerte lluvia tormentosa amenizada con imponentes truenos sobre nuestras cabezas.
Así que el bueno de Enric no tuvo más opción que abortar el plan de la Volta a La Mola Lo Port de 24 kms por imperativo climatológico, hizo bien. Pero a pesar del recorte tuvimos un bonito tránsito por las pistas de la zona del Mascar y una rápida visita a la cascada de la Font de Cova Avellanes, donde paramos a recrearnos con el entorno y resguardarnos un poco de la lluvia.
Veamos el track realmente ciclado el pasado 12 de noviembre 2022:
Pues nada más que añadir sobre la etapa. Todos teníamos ropa seca en el Restaurant del Port, que vino muy bien una vez despegados de la piel todos los ropajes mojados, los cuales hubo que escurrir antes de guardarlos en la bolsa.
Y una vez secos y cambiados, una buena Voll-Damm para celebrar el fin de etapa y este breve visita al paraje dels Ports del año 2022. Regresaremos con condiciones más favorables. Una buena comida de hermandad final de etapa con mucha charla y mucha carne y a media tarde emprendimos el camino de regreso a la Plana Baixa. La llegada a casa nos recibió con una nueva tromba de agua acompañada de más granizo. Noviembre de 2022 fue una fiesta. Salud y buenas pedaladas amig@s.
impresionante documento gráfico lo de la cascada y gente dentro de la (imagino) bien gélida charca. Bravo Mont Caro
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